miércoles, 30 de noviembre de 2011

Una exposición para subir a los altares


Recreación virtual de la exposición
“Gaudí y la Sagrada Familia: Arte, ciencia y espiritualidad” se inauguró en la plaza de San Pedro el día 24 de noviembre
El arquitecto de Dios llega al Vaticano. La exposición “Gaudí y la Sagrada Familia de Barcelona. Arte, ciencia y espiritualidad” abrirá al público el próximo día 24 en el Braccio de Carlo Magno de la plaza de San Pedro, en donde permanecerá hasta el 15 de enero. Todo un acontecimiento impulsado por la Fundación Sagrada Familia, la Fundación Joan Maragall y Acción Cultural Española (AC/E), y que se celebra a propuesta y bajo los auspicios del Pontificio Consejo para la Cultura. 
Viene de un encargo que el Cardenal Ravasi nos hizo hace ya un par de años para que organizáramos en Roma algún acto cultural catalán. Enseguida vimos que teníamos que ir con Gaudí. Es un encargo anterior a la visita del Papa y la consagración de la Sagrada Familia, pero creo que ahora toma una importancia mayor. De algún modo, le devolvemos la visita”, explica Antoni Matabosh, presidente de honor de la Fundación Joan Maragall.

Gaudí en el Corpus de Barcelona
“El Vaticano es un punto neurálgico de la cristiandad y uno de los puntos que por diversas razones atrae más visitantes de todo el mundo. Espero que con esta exposición contribuyamos a que tanto los creyentes como los que no lo son conozcan mejor la figura poliédrica de Gaudí, en la que tanto pesa el artista, como el científico, como el hombre de fe”, añade Daniel Giralt-Miracle, quien ya fuera comisario del Año Gaudí –del que se cumplen justamente diez años–, y es también el responsable de la exposición romana.
Un hombre de fe
Matabosh adelanta que la muestra pretende ser “un poco de síntesis de lo que Gaudí era, de lo que Gaudí quería, de su arquitectura, de su arte, de su ciencia, de su espiritualidad. Verlo en Roma será distinto que verlo en la Sagrada Familia, otro modo de conocer a Gaudí en toda su dimensión”. Especialmente, en esa otra manera de ver a Gaudí como hombre de fe: “A través de la arquitectura Gaudí fue evolucionando, buscando un estilo propio y un lenguaje que expresara su concepción de la vida", explica Giralt-Miracle.
"En esta trayectoria, inicialmente muy secular y finalmente muy espiritual -sigue diciendo el comisario–, Gaudí descubrió la dimensión profunda de la fe y a través de sus conversaciones con distintos obispos y otros religiosos, así como su seguimiento del año litúrgico y la lectura de la Biblia, se le reveló un mundo que quiso trasladar a su obra. Y probablemente la Sagrada Familia es la que encarna mejor todo el simbolismo del mensaje cristiano, sin olvidar la iglesia de la Colonia Güell, otra pieza clave de su arquitectura religiosa”.
Objetos litúrgicos expuetos en la muesta de Roma
Es este el Antoni Gaudí (Reus, 1852-Barcelona, 1926) que también explica Matabosh y el protagonista de la exposición romana: “Gaudí provenía de una familia católica, pero de joven no era de una gran vivencia cristiana. En la medida que fue construyendo iglesias y concibiendo la Sagrada Familia fue cada vez sintiéndose más identificado con lo que hacía y con el sentido profundo de lo que hacía. Fue penetrando en el santoral, en la Biblia, en las particularidades de la vida cristiana, todo ello lo interiorizó y, después, lo plasmó en su obra”.
En el nº 2.777 de Vida Nueva (reportaje íntegro para suscriptores)