Maurizio de Giovanni, el último de los grandes novelistas policíacos italiano en llegar al mercado español. |
De manera breve, una deuda que le debía a la Feria del Libro y a la novela policíaca italiana. Podríamos citar algunos más –por ejemplo, al gran Giuseppe Ferrandino–, pero aquí van algunos apuntes acerca de diez autores que desde Italia han hecho de la literatura negra transalpina la más –y esta es una opinión personalísima– interesante de las que se están escribiendo en el Viejo Continente. Sí, no se sorprenda.
Los dos primeros son inevitables. Los dos grandes referentes históricos de la novela negra, a los que los escritores contemporáneos le deben mucho. Y así lo reconocen. Le siguen otros contemporáneos de todos conocidos, y, finalmente, los últimos en llegar... Cualquiera de ellos es una elección de garantía... Lean y verán.
1. Giorgio Scerbanenco (Duca Lamberti-Milán)
“Venus Privada”
(1966), la primera novela de la serie de Duca Lamberti, ha sido reeditada por Akal este mismo año: un hombre que
consciente del inevitable lado oscuro de la realidad, se ve comprometido a
proteger a los ciudadanos del crimen organizado, de la injusticia, de la
soledad, de sí mismos...
El personaje de este ex médico condenado por practicar la eutanasia que pasa a ganarse la
vida como detective colaborador de la policía –especialmente con el inspector Carrua–, consagraría al autor como uno de
los maestros del género policiaco. Obras aún muy actuales.
Akal ha publicado "Traidores a todos" (2009), "Muerte en la escuela" (2010),
"Los siete pecados y las siete virtudes capitales" (2010), "Los
milaneses matan en sábado" (2011) y "Milán calibre 9" (2011), estas dos últimas el año pasado, en el que Italia conmemoró el centenario de su nacimiento.
2. Leonardo Sciascia (Sicilia)
El escritor
siciliano ha sido uno de los escritores que más ha indagado en el poder, la
Mafia y la corrupción del Estado tanto a nivel policial como político. “La ambición de Sciascia era
hacer una novela política, de indagación sobre el poder”.
Y un día se
asombró al comprobar que sus obras se anticipaban al futuro, como las
investigaciones parlamentarias sobre la Mafia en “El día de la lechuza” (1961)
o el asesinato de jueces en "El contexto".
Sciascia se
identificaba con sus investigadores, a quienes atribuía sus preferencias
políticas, sus lecturas francesas, la pasión por la razón, el placer de las
tardes con los amigos. "El investigador ilumina
los hechos con la verdad". La mejor: “A cada cual lo suyo” (1966).
3. Andrea Camilleri (Salvo
Montalbano-Vìgata)
En 1998, cinco novelas entra las más vendidas en Italia,
todas con Montalbano de protagonista... Se ha relacionado a Montalbano con Maigret, y eso es
inevitable, porque el proceso psicológico que sigue Montalbano es más parecido
a Maigret que a cualquier otro personaje.
Está describiendo la frontera que hay entre la política y el
delito, entre lo ilegal y lo legal, la violación de un tabú como matar, los
límites de las conductas, mientras establece una complicidad con el lector. Es el gran referente de la denominada "novela negra mediterránea".
Otro aspecto importante es el
papel de lo cultural en estas indagaciones de Montalbano: a veces la clave de
un enigma es una clave cultural, un mito, una lectura clásica...
28 novelas y recopilaciones de
relatos-casos. La primera en 1994: “La forma del agua”. En España, la última: “La
caza del tesoro” (2011). Publicará otras siete (cuatro de
ellas ya editadas en Italia).
4. Donna Leon (Guido Brunetti-Venecia)
Quiere hacer algo más que entretener con sus novelas
protagonizadas por el comisario Brunetti. En cada una de ellas nos da una
lección de su catecismo progresista. Pero el atractivo de las historias de Brunetti apenas tiene
que ver con su bien intencionada denuncia de la sociedad contemporánea. Buena
parte del éxito se debe a su “bonhomía” y a Venecia.
Su visión es pesimista. De la ciudad, que sirve de metáfora,
del propio “mundo”... Pero siempre nos queda una sonrisa tras las novelas. Brunetti
se mantiene íntegro, escéptico y aparte, encontrando a pesar de todo ocasión
para gozar de los buenos momentos de la vida, muchos de ellos gastronómicos.
Además, es culto y sensible: lee a Cicerón, Esquilo y
Aristóteles. Todo un referente de la literatura policiaca contemporánea
desde su aparición en “Muerte en La Fenice” (1992).
Su mujer, Paola, pertenece a una familia aristocrática
veneciana y es profesora de literatura inglesa, como lo fue también la autora.
5. Veit Heinichen (Proteo Laurenti-Trieste)
Autor alemán,
pero que vive en Trieste... ciudad fronteriza por excelencia. Eslovenia está
presente. Gran personaje:
inteligente e irónico. Muy “mediterráneo”.También “gourmet”. Entrañable.
Lucidez narrativa. Temas como
la eliminación de fronteras en Europa o los grupos financieros que controlan el
dinero de forma más o menos legal.”Lo muertos del Carso” o “La danza de la
muerte” (2011).
6. Carlo Lucarelli (Comisario De
Luca-Parma)
Trilogía sobre la República de
Saló... escrita entre 1991-1996. Comisario De Luca: personaje
que busca mantenerse en pie cuando todo se derrumba: un hábil investigador que
busca obsesivamente la verdad.
Lucarelli es también muy conocido en Italia por otro
personaje, ahora contemporáneo: Grazia Negro, inspectora de la Policía
Científica-Roma. En España tan sólo una novela de las cinco escritas por
Lucarelli. Precisamente, “Por la boca muere el pez”, escrita junto a Andrea
Camilleri, y que transcurre en Vìgata. Negro, a espalda de sus superiores, pide ayuda a Salvo
Montalbano...
7. Marco Vichi (Comisario
Bordelli-Florencia)
Años 60. Marcados en Italia por la II Guerra Mundial.
Bordelli es ex comandante del batallón San Marcos. Serio, solitario, persistente, con un alto sentido de la
justicia, pero que tampoco duda en hacer cosas que se pueden salir un poco de
la ley.
Bordelli deja libres a determinados delincuentes, porque
“quien roba para comer no es ladrón”, ganándose así las censuras de sus
superiores. Le da igual, él sigue los pasos de la conciencia... Vichi es lento, descriptivo, más interesado en bucear en las
relaciones personales de los protagonistas que el propio desarrollo de la
trama. Paralelismos con hoy.
8. Massimo Carlotto (Marco
Buratti-Padua)
Es un autor
marcado, como pocos, por su destino. Un escritor que
vivió en su propia carne una falsa acusación de asesinato, una detención infame
y una instrucción judicial rocambolesca. 18 años en
prisión y prófugo de la justicia.
Carlotto es todo
un símbolo en Italia, una de las víctimas más famosas de los errores
judiciales. Toda esa experiencia está en
sus novelas. Marco Buratti,
apodado “El caimán”, un ex convicto que, como él mismo, adora el blues y el
calvados. Su “alter ego” confeso.
“La verdad del
Caimán” (Barataria) fue la primera de la serie de Buratti. El argumento lo
llevaba rumiando desde aquella noche de 1976. “Es ciertamente
mi historia. Tanto es así que en Padua, cuando salió el libro, se armó un
escándalo porque la gente reconocía por la calle a los personajes y los
señalaba...”.
Segunda novela de
El Caimán, “El misterio de Mangiabarche” (Barataria): novela negra = periodismo de investigación, aunque
siempre narrado desde la ficción. En Italia, los argumentos están en la
realidad...
9. Gianrico Carofiglio (Guido Guerriri-Bari)
Novelas con
puntos de vistas peculiares. Primero, Carofiglio es juez, antiguo fiscal.
Segundo, Guerriri es abogado penalista. Es el narrador. En el punto opuesto a Carlotto.
Protagonista muy
interesante, en constante evolución. Asume casos muy pegados a la realidad. “Testigo
involuntario”, “Con los ojos cerrados” y “Dudas razonables”...
10. Maurizio de Giovanni (Luigi Alfredo Ricciardi, Nápoles)
Es el último descubrimiento. El Comisario Ricciardi es terco, solitario y tiene un don único: oye las últimas palabras de las víctimas de muertes violentas... Un don, que a veces es una auténtica maldición.
Pero una de las grandes aportaciones de De Giovanni es el retrato de esa Italia fascista. Lumen ha publicado las dos primeras de la serie: "El invierno del comisario Ricciardi" y "La primera del comisario Ricciardi"...